Esbozo de una Enciclopedia Histórica del Anarquismo Español
Miguel Íñiguez

Una obra que hará historia

Íñiguez, Miguel: Esbozo de una enciclopedia histórica del anarquismo español (pról. Juan Gómez Perín), Madrid, Fundación de Estudios Libertarios Anselmo Lorenzo, 2001, 648 págs. Precio: 7.200 ptas.

En muy pocas ocasiones de nuestra vida nos encontramos ante obras como la que hoy presentamos, muy difícil de valorar porque uno no encuentra calificativos suficientes para elogiar y ensalzar este magnífico y gran trabajo al que le ha dedicado el compañero Íñiguez su vida.

Hasta ahora, nunca había leído (como he tenido que hacer por una serie de razones) una enciclopedia desde el principio hasta el final. Siempre he utilizado este tipo de manuales como obras de consulta para salir de dudas, que es para lo que pienso que se publican. Pero no estoy arrepentido. Página a página he ido leyendo con avidez, disfrutando y maravillándome, sin el más mínimo atisbo de aburrimiento, un trabajo que pienso sorprenderá a muchos. Estos estudios faraónicos son más propios de equipos de investigación que de la soledad tenaz de una sola persona, como Íñiguez, señero e incansable corredor de fondo. Se requiere una voluntad de acero, constante, y una cultura, conocimiento, preparación y erudición excepcionales para haber podido culminar esta gran obra de difusión del anarquismo y anarcosindicalismo españoles, sin olvidar el gran amor por la filosofía libertaria y el esfuerzo puesto en la labor. Magistral.

Conforme pasaba páginas leídas, en algún momento de descanso, no podía dejar de pensar cuántas horas y días de ocio no le habrá dedicado no solo a leer, sino visitar archivos, bibliotecas y hemerotecas, haciendo kilómetros, de una ciudad a otra, y buscar, consultar, seleccionar y redactar un resumen para que hoy, de forma plácida y amena, podamos conocer los personajes, obras, hechos y organizaciones libertarias. ¡Cuántas horas no le habrá sustraído a los amigos, compañera e hijos!

El autor comenzó hace más de veinte años con el proyecto. Quizás lo ideó como una obra utópica que hoy podemos ver hecha una realidad. Su tarea ha consistido en lo siguiente: ir recogiendo los nombres y apellidos (con sus respectivos seudónimos cuando los hay y los ha podido identificar) de todos aquellos compañeros anarquistas y anarcosindicalistas españoles que ha conseguido localizar en cualquier documento, o por testimonio oral, e ir confeccionando apuntes biográficos. Además la Enciclopedia tiene entradas de todas aquellas publicaciones periódicas ácratas y del sindicalismo anarquista que constituyen el acerbo cultural libertario español, detallando sus distintos períodos y los enfoques ideológicos que les marcaron. Las organizaciones anarcosindicalistas también tienen su propio acceso, con su respectivos congresos, donde se explica su origen y desarrollo social; e igualmente, tienen cabida sucesos significativos históricos del anarquismo hispano.

Los esbozos biográficos no son homogéneos. A destacados militantes les dedica más textos que a otros compañeros menos conocidos; pero sin duda ninguna, a lo largo de las páginas podemos ver que el anarquismo no lo constituyen unos cuantos protagonistas iluminados, sino los trabajadores anarcosindicalistas en su conjunto. Sobre algunos solo se escriben frases como: «Luchó en el Batallón Bakunin (Vizcaya 1937)» o «Condenado a diez años por los sucesos de Vera (1927)». Por razones obvias, Íñiguez en algunos casos no ha podido recabar más información. Pero el título (Esbozo...) ya indica que no es una obra definitiva y conclusa. Como otras muchas enciclopedias se empieza publicando un volumen que en sucesivas ediciones se va ampliando y multiplicando. Nuestro compañero y autor sigue recogiendo información con este fin. En esta primera edición, Íñiguez ha incluido a los compañeros desde el siglo xix, y ha puesto el límite cronológico de la inclusión en todos aquellos más jóvenes que iniciaron su andadura, por razones de edad, al final del franquismo y posfranquismo, aunque hay algunas excepciones. La próxima no solamente incluirá a estos, sino que muy posiblemente irá acompañada de ilustraciones y fotografías.

En las reseñas biográficas me ha sorprendido mucho las vueltas que da la vida también en el anarquismo. Los distintos motivos por los que alguien llega al ideal no son menos que aquellos por los que un compañero los abandona. Hay hombres y mujeres de origen humilde y aristocráticos, analfabetos e ilustres, y frailes, carceleros, militares, policías... (personajes muy alejados de la acracia) que acaban abrazando las ideas manumisoras. También ocurre al revés: anarquistas que acaban retirándose a un monasterio o convirtiéndose en confidentes de la policía (unas veces para salvar sus vidas y otras plenamente convencidos). Hay casos lunáticos, que como las mareas suben
y bajan, se acercan o alejan y aman o despotrican contra el ideal libertario, según épocas. A veces, los más recalcitrantes, intransigentes y puros anarquistas son los que más oscilan entre un extremo (rechazo absoluto del Poder) y otro (deseo de Poder absoluto para transformar la realidad). Historias tan ricas y contradictorias como la vida misma.

Hay una serie de constantes a lo largo de casi todas las referencias: la entrega y permanente obsesión por denunciar las injusticias, proponiendo soluciones libertarias para erradicar aquellas, con las publicaciones (allí donde hay un anarquista hay letra impresa), y la persecución ininterrumpida por el Poder, sea del signo que sea, por impedir que afloren las páginas escritas. La tortura, la cárcel y el exilio son permanentes: grande es el dolor que los obreros anarcosindicalistas sufren por su pretensión de construir un mundo de justicia social. Si hiciéramos cuentas, seguro que hay más muertos y años de cárcel que entradas o puntos de acceso tiene la enciclopedia; en algunos casos hubo compañeros que pasaron más tiempo entre rejas que en libertad. Y durante la Revolución española, la muerte de muchos compañeros y compañeras. El exilio, de los más masivos de la historia, tampoco hay que olvidarlo. América (Argentina, Cuba, México...) y Francia solían ser los lugares de refugio, donde continuaban la difusión de las ideas. Cuando en el país de acogida se hablaba nuestro idioma, este no constituía ninguna frontera para continuar con la difusión ácrata; si se hablaba otra lengua, se aprendía. ¡Cuántos compañeros políglotas hemos tenido! Vidas rotas por la persecución, en general más propias de novelas, pero lamentablemente son reales.

Se colige a lo largo del texto que el anarquismo y las letras van unidas. No se puede concebir la acracia sin libros, periódicos o revistas. Muchas de las obras anarquistas son indicadas en las reseñas biográficas; algunas de gran valor literario y social, en ciertos casos injustamente olvidadas o inéditas.

Las publicaciones periódicas tienen su entrada por el título: Campana, La; Solidaridad Obrera, Tierra y Libertad, etc., pero no solo están las más conocidas o de mayor tirada, sino que podemos encontrar cualquier boletín de un grupo libertario de algún rincón remoto de la Península. Así como en la biografías ya hemos dicho que, salvo excepciones, no se incluyen los jóvenes que comenzaron su lucha libertaria durante el final del franquismo o posfranquismo, en las publicaciones periódicas llega hasta la actualidad, año 2000.
El conocimiento de las organizaciones sindicales anarquistas desde sus inicios en el siglo xix, muy especialmente a través de sus congresos, dan prueba de la sabiduría y erudición de Íñiguez, que causan envidia al más común de los mortales. A través de la evolución, luchas internas, tendencias, etc. a lo largo de la historia, podemos hacernos una idea del momento en el que vivimos. Como el Guadiana, las organizaciones surgen o desaparecen dependiendo de muy diversas y múltiples circunstancias.

Aunque, como decía al principio, este ingente trabajo me es muy difícil de resumir, podemos concluir que será una obra de consulta muy necesaria, de obligada referencia, para todo aquel que quiera conocer y profundizar en la historia, organizaciones, personas, ideas y prácticas de la filosofía libertaria española. Quizás este nuevo milenio sea más fructífero en trabajos como el que reseñamos y todos nos animemos a seguir contribuyendo a ampliar el conocimiento de la realidad, historia, ideas y prácticas anarquistas. La española ya ha iniciado su andadura. Bueno sería que los compañeros de otros rincones hicieran lo propio. Como es mucho pedir, que el trabajo se haga en equipo. En Italia, nos comenta Claudio Venza, van a empezar un proyecto parecido. Que algún día veamos los frutos como este que hoy presentamos. Muchas gracias a Íñiguez y a todos aquellos compañeros y compañeras que han hecho posible dar a la luz esta magnífica obra.

Amador